Finalizó el pasado sábado
la primera edición del Torneo Minuano de Reserva, con la consagración del Club
Olimpia como campeón. Sin dudas, uno de los pocos equipos que le dio
importancia al campeonato, y que obtuvo su premio.
Primera Página requirió la palabra de Álvaro Trabuco, quien
encabezó el cuerpo técnico que tenía además a Jonathan Carreras (Ayudante
Técnico), Santiago Guadalupe (Preparador Físico), Sergio Buzón (Kinesiologo) y
Raúl Trabuco (Equipier).
Álvaro Trabuco, al
recordar su designación como técnico de los “alas rojas” para esta experiencia
expresó que “cuando se me planteó la posibilidad de dirigir no lo dude, me
encanta hacerlo y el amor hacia el club terminó de decidirme. Gerardo
‘Chopi”’Zeballos me llamó, me comunicó la decisión, lo que se buscaban eran
ideas nuevas, cambiar algunas cosas y desde ese momento lo tomé como un lindo
desafío. Era un Torneo nuevo, nunca se había jugado, pero Olimpia como
institución grande, por historia y su gente, debe afrontar todo campeonato
buscando el objetivo máximo”.
TORNEO MAL ENCARADO POR
ALGUNOS CLUBES
Referente a la poca
importancia que le dieron algunas instituciones a la Reserva, comentó que “creo
que el torneo de Reserva fue mal encarado por diferentes clubes que no
interpretaron el verdadero sentido del mismo, que era darle rodaje a aquellos
futbolistas que no tenían muchos minutos en primera, incluso a aquellos que de
alguna forma u otra habían dejado la actividad. Fue una linda oportunidad para
ellos y Olimpia desde el primer día habló con los jugadores, los convenció, los
motivó y ahí están los frutos”.
CAMPEONATO PAREJO
Sobre el nivel
futbolístico del campeonato, opinó que “a mi entender fue un torneo parejo, a
falta de 2 fechas incluso había varias instituciones con posibilidades de ganar
la primera fase e incluso no estaba cerrada la clasificación a la Liguilla
final. Creo que la posibilidad de contar con futbolistas que ya tienen su roce
en primera elevó el nivel del campeonato. Luego como todo certamen a la
definición llegan los que mejor hacen las cosas, pero a mi entender fue una
linda competición”.
Sabido es que el torneo
tuvo muchos parates, sobre todo cuando se planteó una denuncia y la espera de
un fallo. Ante esto Trabuco dijo que “fue muy complicado motivar a los
jugadores porque el jugador quiere competencia, que se juegue, y entrenar con
esa incertidumbre sobre si se terminaba o no el campeonato desmotivaba mucho, y
eso se vio reflejado en la concurrencia a los entrenamientos. Por suerte
supimos con Jonathan armar un grupo muy unido, no solo dentro sino fuera de la
cancha, que sin dudas es lo más difícil, y eso llevó a que siempre estuviéramos
de alguna forma u otra comunicados y todos en la misma sintonía”.
LA RENUNCIA Y LA VUELTA
En medio de esa
incertidumbre sobre si el torneo continuaba o no, Álvaro Trabuco presentó la
renuncia al cargo, más allá que después volvió al mismo. Sobre el punto recordó
que “fue una decisión siguiendo mis principios del respeto y la buena fe, cosa
que había faltado por parte de quienes tienen que llevar adelante nuestro
fútbol minuano, dejando mucho que desear en la función que cumplen, sin nombrar
a nadie, al que le quepa el traje que se lo ponga! Lo que me hizo reveer la
decisión fue mi amor hacia el club, el respeto hacía los muchachos que se
habían esforzado durante todo ese tiempo y no merecían terminar así. Eso fue
más fuerte y decidí seguir en el cargo”.
LAS VIRTUDES DEL CAMPEÓN
Al dar su visión sobre las
virtudes que tuvo este Olimpia campeón, afirmó que “creo que formamos un
plantel de ‘hombres’, donde primó la humildad y el sacrificio, siempre
respetando las decisiones que tomaba el cuerpo técnico, tirando todos por la
causa Olimpista. Luego yendo a lo futbolístico formamos una columna vertebral
muy sólida, con una mixtura entre jugadores con algunos años en primera y
juveniles que vienen surgiendo, gracias al gran trabajo de Carlos Villete, que
tienen un futuro bárbaro y que Olimpia va a disfrutar mucho con ellos. Se podía
jugar bien o mal, pero la entrega jamás se negociaba”.
NO FUE UNA REVANCHA
Consultado sobre si el
triunfo ante Nacional fue una revancha por lo que fue el fallo del Tribunal,
dijo claramente que “en lo personal no lo tomé como una revancha, quizás algún
integrante del plantel si lo hizo. A mi entender el fallo fue totalmente
desacertado pero había quedado allí, y el campeonato tenía que seguir. Cada
cual tendrá su conciencia tranquila o no, pero lo importante que al fin y al
cabo se hizo justicia con el mejor equipo del año que fue Olimpia, y ‘en la
cancha’, como muchos pedían y como debe ser”.
LAS DEDICATORIAS
Finalizando la entrevista, Trabuco dedicó el título
“a mi familia que está muy identificada con el club y que fueron quienes me
llevaron a sentir esto por Olimpia. A mi hija Oriana, que sin dudas uno a veces
deja de hacer cosas con ella para dedicarle tiempo a esto. A mi novia Karina,
que ha sido un pilar muy importante en mi vida en este último tiempo, aunque no
compartimos los mismos colores sé que está feliz por mi. Y a toda esa hinchada
hermosa del club donde tengo muchos amigos y que sin duda es la más hermosa de
Minas. Para todos ellos, ¡Salud Campeones!!!”
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