En la sesión de la Junta Departamental
del miércoles 6 de abril, Julián Mazzoni (Lista 1001, Partido
Comunista, Frente Amplio) recordó a Jesús Pais, recientemente
fallecido. Estas fueron sus palabras:
“La dictadura que asoló el Uruguay
en las décadas del 70 y el 80 del siglo pasado ha sido catalogada
por nosotros como una dictadura fascista. Decía en 1935 el búlgaro
Georgi Dimítrov en su artículo 'El fascismo y la clase obrera': “El
fascismo en el poder es la dictadura terrorista abierta de los
elementos más reaccionarios, más chovinistas y más imperialistas
del capital financiero”.
En el citado trabajo, quien era
secretario general de la Internacional Comunista no sólo caracterizó
al fascismo desde el punto de vista de clase, sino que dio los
elementos para luchar contra él, las alianzas necesarias y la
estrategia y la táctica que conducirían a su derrota, advirtiendo
que sería luego de una sangrienta batalla. También realizó las
autocríticas correspondientes por los errores que habían permitido
la consolidación de regímenes fascistas en Italia, Alemania,
Polonia y otros países del este europeo.
Como ustedes saben, me esfuerzo por
fundamentar mis acciones a través de una teoría política. Los
comunistas uruguayos leímos a Dimítrov y adaptamos su análisis
para enfrentar la dictadura fascista uruguaya. Quiero recordar hoy
que la dictadura fascista del Uruguay desarrolló desde octubre de
1975 un plan sistemático para liquidar al Partido Comunista, la
llamada Operación Morgan, coordinada por la OCOA. Consistía en
atacar especialmente los cuadros intermedios, que permitían conectar
la dirección del Partido con la base militante, que había
participado de la Huelga General y continuaba resistiendo a pesar de
la ilegalización. El plan consistió en la detención y tortura
masiva de miles de militantes comunistas, pero también de otros
sectores de la izquierda, una verdadera operación de exterminio. Ese
operativo se desplegó con toda su barbarie en Minas en diciembre de
1975 y enero de 1976. Luego de brutales torturas en el batallón de
infantería nº 11, el 29 de marzo desembarcó en el cuartel el juez
militar Gamarra, y procesó a ocho de nosotros que fuimos acusados de
“asociación subversiva”. Comenzamos allí un periplo que nos
llevó a estar detenidos en el Regimiento de Caballería nº 8, con
asiento en Melo, y luego en el Penal de Libertad. Se están
cumpliendo ahora 40 años de que el fascismo realizara esa operación
en nuestra ciudad. Ustedes se imaginarán los lazos de solidaridad
entre quienes sufrimos esos castigos por nuestras ideas, y también
los que se establecieron entre nuestras familias, que deambulaban por
los cuarteles buscando información, negada sistemáticamente hasta
esos días. Y en los años siguientes, movilizarse hasta Melo o a
Libertad para poder visitarnos.
El pasado 29 de marzo falleció Jesús
Pais, uno de los compañeros con los cuales compartí esa brutal
experiencia. En mi caso significó cinco años de cárcel, en el suyo
seis. Fue su hermano Luis -que debió partir en aquellos días de
abril al exilio, luego de ser recibido en la embajada de México-
quien me hizo notar la coincidencia de la fecha: Jesús falleció
exactamente 40 años después de que nos procesaran. Como
consecuencia de eso, Jesús fue destituido como funcionario de Salud
Pública y de la Intendencia. Su familia debió pasar por durísimas
condiciones ya que su esposa, la maestra Zaida Balduini, también fue
perseguida por las autoridades educativas de aquel momento.
Por esas razones es que quiero expresar
aquí el dolor por el fallecimiento reciente del compañero y hacer
llegar a sus hijos y a sus hermanos estas palabras de sentido
homenaje y recuerdo. Y agregar, que siempre tenemos que recordar que
la derrota del fascismo ha costado mucho sufrimiento a nuestra gente
y que la consolidación de la democracia pasa por la verdad y la
justicia, elementos que aún no se han logrado definitivamente en
nuestro país”.
Julián Mazzoni
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