El Anexo
Escuela 72, perteneciente a la Escuela Técnica UTU de Minas, donde funciona un Ciclo Básico Agrario, está
terminando su segundo año, con 1º y 2º, y el próximo año ya tendrá el 3º de
Ciclo Básico. Además tiene cursos de gastronomía y deportes que son FPB
(Formación Profesional Básica que atiende a jóvenes que se desvincularon de la
educación pública a partir de los 14 años, y no han completado el Ciclo Básico,
a partir del FPB hacen los tres años, completando de forma similar, y
acompañado de un taller). Casi 30 docentes participan de la formación a través
de 18 materias por nivel, asisten 72 jóvenes (es mixto), entre el Ciclo Básico
y los FPB.
“ESTE ES EL MEJOR LUGAR”
Alicia
Bonifacio, referente comunitaria, recibió a Primera Página en
momentos en que hacía tareas de corte y limpieza de pasto, junto a alumnos.
Contó que “no hay director acá porque este anexo no es autónomo, depende de la
Escuela Técnica Minas, cuya directora es María Helena Lorenzo”.
Bonifacio
está siempre en actividad, “aunque no doy ninguna asignatura -soy profesora de
geografía-, pero acá hago de todo, porque esto es lo que me gusta, me crié en
el campo, y para mí esto es hermoso. Me pusieron en el mejor lugar que me
podrían haber puesto”.
COMPONENTE
AGRARIO
Respecto al
componente agrario, Bonifacio dijo que “se hace huerta orgánica, con profesor
de taller y asignaturas asociadas al taller. Aprenden el uso de herramientas,
seguridad en el trabajo, cultivan según las estaciones, es toda producción
orgánica, no usan químicos, lo que producen es poco porque son muestras de
aprendizaje, las que verdaderamente tiene producción son las escuelas agrarias.
Aprenden la rotación de cultivos, este año fue complejo por la sequía, afectó
mucho, no se podía regar, es agua de OSE y no tenemos pozo”.
TIEMPO
COMPLETO
Aseguró
Bonifacio que los jóvenes que hacen el componente agrario permanecen tiempo
completo en la escuela, de 7:45 a 17 horas, recibiendo la alimentación
correspondiente a desayuno y merienda con leche, cocoa y azúcar que provee
INDA. El almuerzo es en el Complejo Municipal Las Delicias, que es atendido por
la IDL. Recordó que en el complejo funcionaban cursos comunitarios de UTU que
se trasladaron a la escuela “y fue una tarea espectacular la que llevaron
adelante, son experiencias comunitarias muy buenas, que funcionan fuera de la
institución, y muy bien. Además se captan otro tipo de chiquilines, y el lugar
acá los atrapa, no hay tanto bullicio, tienen otros tiempos, otra relación
entre ellos, porque no hay tanta pared, tantos muros”.
DESVINCULACIÓN
CASI CERO
Respecto a
la asistencia, Bonifacio señaló que “la desvinculación es casi cero, la mayoría
son del barrio, pertenecían a las escuelas 12 y 102, hay un chico de la escuela
de Ortiz y otro del barrio Garolini. Trabajamos mucho y muy bien con el
programa Tránsito Educativo, que es dentro de la educación pública, se capta
muy bien, y de las escuelas rurales si hay interés bienvenidos serán”.
0 comentarios :
Publicar un comentario