Qué placer cuando
el teatro se hace desde la pasión y el amor y eso lo trasmiten con
tanta inocencia y entrega, además sin parafernalias ni tecnologías,
a puro teatro. En la sala de actos del Instituto de Formación en
Educación -que es un volcán de acciones de todo tipo erupcionando a
favor de la sociedad minuana-, dirigido a docentes y estudiantes de
esa institución, se presentó la obra “Solo las alas”, de
Ernesto Pérez, con dirección de Julio Persa, las actuaciones de
Ernesto Pérez y Leonor Chavarría en una gira nacional en los
Institutos de Formación Docente de Soriano, Colonia, San José,
Florida, Flores, Canelones, Maldonado, Rocha y Lavalleja, como parte
de los proyectos seleccionados por los Fondos Concursables para la
Cultura del MEC. Primera Página
agradece la invitación del gestor cultural y productor ejecutivo del
espectáculo, Leonardo Urrutia.
UN TEXTO HERMOSO
La obra “Solo las alas”
es una mezcla del absurdo de Eugène Ionesco (Rumania, 1909 -
Francia, 1994) con la poética de Clemente Estable (San Juan
Bautista, Canelones, 1894- Montevideo 1976) y el talento de la
dramaturgia de Ernesto Pérez para armar un texto sólido, solvente y
muy teatral, “donde por una misteriosa razón, a determinados seres
humanos se les da un par de alas al nacer. Existe un decreto que
establece que quienes abandonen el vuelo deberán justificar las
razones que lo llevaron a hacerlo.
En cumplimiento de ese
decreto es llamado a declarar Ángel Regalado, maestro con treinta y
tres años de trabajo, con la autoestima por el piso y un delirante
humor. La obra se desarrolla en el depósito de un Instituto de
Formación Docente, antigua pista de despegue para egresados, ya
clausurada, donde trabaja y vive en un armario La Funcionaria,
también maestra, que lo somete a un minucioso interrogatorio”,
expresa un comunicado publicado en internet. La tensión está puesta
en el enfrentamiento de estos dos personajes –Regalado y La
Funcionaria- que representan el anhelo de la formación humana y la
burocracia, respectivamente. La obra transita por el filo del
panfleto por momentos, por una descarnada necesidad de honestidad y
dignidad en otros, por el humor desde lo más humano, y la
resiliencia como esperanza para seguir en este mundo tan caótico en
el que vivimos. Es una obra para ver varias veces, para seguir
encontrando puntas a lo que allí se dice, para escuchar la palabra
de Estable, un humanista total al que deberíamos acercarnos mucho
más.
TEATRO
La dirección de Julio
Persa es muy consistente, mantiene el control de la acción de manera
muy segura, no hay caídas, ni excesos, todo está controlado con
mucho talento, y llevado con una enorme solvencia por La Funcionaria
que compone Leonor Chavarría, una actriz estupenda que dispara en
varios registros interpretativos, tensión, dramatismo, humor, y una
voz y un rostro de una expresividad descomunal. Pérez impone la
ternura, ese hombre con un ala, esa tristeza volando sobre la
esperanza de un mundo mejor, sobre todo de una educación mejor, con
un manejo de tonos interpretativos físicos y emocionales
conmovedores.
COMPARTIR
Finalizada la obra, el
director y los actores conversaron con el público. Persa contó que
Pérez, además de actuar la obra, la escribió: “es maestro, y es
muy interesante cómo llegó a escribir este texto y también poder
escuchar a Leonor sobre lo que ha sido su creación, quien además es
sobrina de Ernesto, o sea queda todo en familia”.
UN HOMBRE CON UN ALA
Pérez contó que “Solo
las alas” tiene varios antecedentes, “porque yo soy de ir
anotando cosas, veo un perro arriba de un árbol y digo por qué se
subió, y lo anoto, y así con todo. Un día estaba en el BPS
haciendo una cola y había un señor con un buzo colgado en la
espalda, su sombra en la pared proyectada parecía que tenía un ala,
y anoté eso. ¿Qué haría un hombre con un ala en el BPS, haciendo
una entrevista? Al comenzar el año, el director nos trajo los textos
de Clemente Estable, donde está contenido todo el pensamiento
educativo, poético y filosófico de Clemente Estable, que en la obra
se llama el Plan de Vuelo Estable, al que recurre continuamente el
personaje. Uní las dos ideas, estaba integrando el gremio de los
maestros en San José, y teníamos un grupo de teatro interno. En el
Día del Maestro hacíamos algo, a veces una investigación
histórica, u otras propuestas, y en el año 2007 la situación en
magisterio estaba un poco complicada (ahora está complicada de
vuelta) y le hicimos la obra como regalo a los compañeros, y después
vinieron festivales de teatro, algunos premios y nos aconsejaron
algunos críticos que le sacáramos los reclamos estrictos que
hacíamos, para que tuviera un sentido más universal sobre la
vocación. A mí Estable me fascinó toda la vida, si bien no se
estudia mucho, es un poeta en el fondo, y haciendo esta obra tuve la
suerte de conocer a una psiquiatra que era íntima amiga del hijo de
Estable, ‘Rayo’ le dicen porque anda muy despacio, y nos
encontramos y tenemos una amistad muy grande y ahí aprendí muchas
cosas de su padre. Y como Clemente Estable es un autor que en
magisterio se toca, me pareció interesante abordarlo desde el
teatro, desdramatizando situaciones que van desde el humor que es de
donde se puede llegar a muchos lugares, nos reímos de nosotros
mismos, de lo que vivimos y rescatar dos cosas de la obra que son
importantes, que la vocación es la actitud más la pasión, como
todo maestro ustedes (dirigiéndose a los estudiantes) van a hacer
cosas que van más allá de la actitud, y por eso van a tener que
poner la pasión, porque trabajamos con niños, y porque la vida del
maestro es el subir y el bajar”.
MALDITA BUROCRACIA
Sobre el personaje La
Funcionaria, Pérez dijo que “surgió después, fue extraño, la
obra tiene muchas mutaciones, al principio era una mujer que se
entrevistaba con un hombre al revés de lo que es hoy, pero quedaba
muy tocado el tema de género y muy violento con una mujer, y nos
pareció que entrábamos en un terreno en el que no queríamos,
también nos parecía interesante que La Funcionaria fuera más joven
que el hombre, y que se diera la situación del viejo dando ánimo a
un joven. La Funcionaria representa la burocracia, y los hechos son
reales, y mucho más grave en la realidad, porque por la burocracia
pasa por encima del dolor de los demás”.
Aplausos.
Por Gorge Gómez
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