Un
grupo de personas opinó hace unos días a través de los medios acerca de sus
diferencias respecto al manejo del Refugio de perros de Zulma Gualco. La nota
con colaboradoras del refugio, publicada en la edición de Primera Página del
viernes 26 de junio, en página 3, hizo que el presidente de la organización
gubernamental “Ángeles sin voz”, Pedro Cáceres, al igual que Zulma Gualco,
solicitaron responder a estas críticas, que hacían referencia a métodos
autoritarios de Zulma y a un manejo al menos desprolijo del dinero y las
donaciones, al igual que de las adopciones de animales del refugio.
“ME
REVOLVIÓ EL ESTÓMAGO”
Pedro
Denis señaló que cuando leyó el artículo, “no por el buen trabajo periodístico,
sino por el contenido, me revolvió el estómago. Si son colaboradoras como se
hacen llamar, salen a decir cosas sin querer dar los nombres, salen a hablar de
la persona como Zulma Gualco, que hace 10 años que está haciendo un trabajo
social que nos compete a todas, pero lo hace ella sola, los 365 días del año.
Lo he visto, no me lo contaron. Me acerqué a Zulma en el 2013, cuando en un
informe de VCC vi las necesidades de ella, hablé con los vecinos del refugio
que tenía al lado de la Cancha de Central, empezamos por ayudarla y también
vimos la posibilidad de plantearle a la intendenta Adriana Peña la situación,
lo hicimos y la intendenta sugirió la idea de que tuviera Zulma un mejor lugar
para atender los animales, pero sobre todo para que ella pudiera hacer su
trabajo en mejores condiciones para su salud. También planteó la intendenta que
se unificara el refugio de perros que hay en Planta 3 con el de Zulma, y en eso
se empezó a trabajar”.
EL
REFUGIO, LA ONG Y ZULMA
Denis
señaló que Zulma hace su trabajo honorario e incondicional. “Ella vive de su
pensión y de ahí también saca para mantener los perros, ella pagó el agua en
ese primer refugio, y sí es cierto que recibe ayudas de la ONG Ángeles sin voz,
que se formó en base al grupo de personas que atienden el refugio de la Planta
3, que tiene socios, y como ya tenían el nombre y un grupo armado nos juntamos
los del Refugio de Zulma Gualco con los de Ángeles sin voz. La intendencia le
dio en comodato a esta ONG el predio que ahora se inauguró, para que Zulma
trabaje allí, de la manera que lo viene haciendo”.
Agregó Denis, que además de él como presidente,
están Nancy Hitz (secretaria), Marina Trías (tesorera), Blanca Machín, Isabel
Rubí, Graciela Tevelini, Charo y Zulma, al frente de esta ONG, que cumple con
todos los requisitos legales, personería jurídica y demás, “y se formó a pedido
de la intendenta Peña, para respaldo de Zulma, pero la intendenta dijo que ese
espacio en la Casa de Campo de la IDL se lo daba a Zulma, para que allí
funcionara el refugio”.
Manifestó
Denis, que se empezó a construir los caniles en el predio de la intendencia. Hubo
interesados por ayudar, como el SUNCA y el Batallón, pero iniciadas las obras,
la intendencia priorizó el trabajo de reacondicionamiento del Parque Rodó, y se
pararon las obras de los caniles, porque se llevó a todos los funcionarios, y quedó
en espera. Además era una obra compleja porque tenían que hacer un saneamiento,
para los residuos generados por los perros que no contaminara. O sea, la obra
se paró”.
“TODO
LO HAGO POR ELLOS”
Zulma Gualco
trasmitió tranquilidad y sentirse muy segura de lo que hace. “Todo lo hago por
ellos” -dice “ellos” durante toda la nota cuando se refiere a los perros-.
Sonrió y dijo que “no necesitan poner los nombres de quienes dijeron esas cosas
de mí, sé muy bien quienes son. Se llamaron colaboradoras cuando les abrí la
puerta, decían estar admiradas de cómo atendía los animales, como sostenía el
refugio, ahora se dieron vuelta, ya no están”.
“DESPUÉS
NO FUERON MÁS”
Contó
que las colaboradoras “empezaron por hacer una rifa de un televisor, no me
gustó la idea, pero lo acepté porque como colaboradoras estaban proponiendo
algo más, pero no me gustaba porque había que esperar un mes para ingresar ese
dinero al galpón para pagar el alimento para ellos, y en esos meses nadie
colaboró -era enero y febrero-. Me atrasé en el pago del agua en esos meses. Tuve
que abrir una cuenta en Redpagos, para pagar el agua del refugio al lado de la
cancha de Central, porque me la cortaban, y no pueden estar ellos sin agua, era
pleno verano, hay que ponerles agua tres veces al día. Cuando abrí la cuenta en
Redpagos las consulté a ellas, estuvieron de acuerdo, y en pocas horas había
más de tres mil pesos, y se pudo pagar los dos recibos de agua, y eso le
agradezco a la gente que colaboró. Pero después de eso, la cuenta siguió
abierta, pero fue una entrada mínima, y la retiraba igual para llevar ración
para el refugio, y el resto lo ponía yo. Ya ahí las colaboradoras no se
aparecían al portón, solo algún mensaje. Después de la rifa del televisor
dijeron que se iba a hacer la rifa de un aire acondicionado, hicieron las
libretas, pero se abrieron, no colaboraron más, no fueron más al refugio, me
quitaron el aire acondicionado, pero como estaban las libretas hechas, levanté
las libretas, y lo compré yo en Barraca Sergio Giménez el aire acondicionado,
se hizo la rifa, ya se sorteó y felicitó a la persona que lo sacó. Y el aire
acondicionado no se va a pagar con el dinero de la rifa, lo voy a pagar yo de
mi bolsillo”. Agregó que también ella misma colocó una alcancía en Barraca
Sergio Giménez, “que cuando se hace el conteo del dinero, queda en la barraca
para necesidades de materiales, no toco yo ese dinero”.
DEFICIENCIAS
HAY, VETERINARIO NO
Al
preguntarle por sus declaraciones en televisión, que según estas personas
habían sido fuera de lugar, sobre el predio que le dio la IDL , Zulma dijo, “pero es así,
y por esas deficiencias que hay, pasan cosas irremediables, se siguen matando,
y tengo una de ellas lastimada que la estoy curando yo, porque la cobertura de
veterinario es solo para la castración. Dijeron también que tenía apoyo
veterinario, no es así, no tengo cobertura veterinaria como se necesita en un
refugio”.
¿LUCRAR
CON ESTO?
Respecto
a que el manejo del dinero es poco claro, y que nunca tiene dinero, como dicen
las colaboradoras en la nota, Zulma señaló que “no hay entrada de dinero, no sé
a qué le llaman entrada de dinero, solo es un número de cuenta en Redpagos, es
muy poco o nada la entrada de dinero. Por lo que dicen, yo estoy lucrando con
esto. Yo esto lo hago por ellos, no por mí. ¿Lucrar? Sacándome años de vida,
disponiendo de mi tiempo gratuitamente, con hambre o con sed, ando torcida
porque tuve un accidente, con gripe, y si tengo dolores compro un medicamento y
sigo, porque eso no me importa, me importan ellos, lo hago con todo el amor que
ellos se merecen, me he entregado a ellos totalmente. Es cierto que tengo una
moto, que me dio la intendencia y después yo compré otra. La que me dio la
intendencia para el trabajo no tenía arranque eléctrico, y como tengo problemas
de columna lo mejor era una moto con arranque eléctrico, entregué la moto y
saqué otra y pagué la diferencia con mi dinero”.
“QUIEREN
PODER, MANDAR”
Según Zulma
en el caso de las colaboradoras que la critican “lo que hay es un interés, yo
lo tengo claro cual es. Es cierto que yo estoy con la tarea, voy, vengo, no me
ocupo del comentario y del ‘chiquitaje’, ando en lo que tengo que andar, que es
atendiéndolos a ellos, pero no soy boba, sé cuál es el interés de ensuciarme.
Ellas dicen que ayudan, pero cuando hay que ayudar nadie puede, nadie se
remanga. Acá lo que quieren es poder, mandar, hacer y deshacer. ¡Quieren poder!
Pero sin ensuciarse, quieren figurar fuera del portón”.
Denis,
manifestó: “¡Vamos! Saben como se maneja Zulma en su vida privada, saben como vive;
según estas colaboradoras Zulma está lucrando, con lo que lucra tendría que
tener auto cero kilómetro, irse de vacaciones, tener empleados, pero no. Ni
tiene auto, ni se va de vacaciones, ni tienen empleados, ella hace todo, ella
con su bicicleta va y viene, cura los animales, les hace de comer, los
desparasita. Es muy cruel hablar así de ella”.
EL
TERRENO
Zulma
aseguró que otro de los ítems que molesta “es el espacio que me dieron, y el
que yo dejé, que pensaban que era de la intendencia. Ellas querían que yo
sacara todos los animales, yo dejé cuatro, dicen que yo pagué ese terreno con
el dinero de los perros, y eso no es cierto. Una persona colaboró conmigo, dio
el dinero y lo pagó esta persona al dueño, y firmamos yo como propietaria y él
como testigo”.
Acotó Denis
que Zulma “empleaba su terreno para un servicio público, son 10 años de
trabajo, donde ella utilizó su dinero, su vida para cuidar los perros, donde
nadie dijo nada, la intendencia entró a colaborar y ahora aparecen personas que
quieren figurar. Creo que es parte de una moda con los perros, ‘¡ay pobrecitos
los perritos!’, pero nadie se los queda, se los llevan a Zulma, que se entienda
Zulma. Es muy fácil levantar el perro y hacer el papel de bueno y después
dárselo a otro para que se haga cargo. Y si tienen el corazón tan grande
deberían también llevarle unos 30 quilos de comida por mes también. Eso es
responsabilidad, eso es querer a los animales y es ayudar”. Zulma agrega que
“siempre llega el animal, pero nunca la bolsita de la comida”.
FUTURO
Denis dijo
que espera que se una vez se instale el nuevo gobierno departamental, que “la
intendenta diga que seguimos trabajando con el proyecto que teníamos, que la ONG
haga una campaña de socios, por lo menos 500 socios a 50 pesos son 25 mil
pesos, mensuales, que no alcanzan para cubrir el gasto de los insumos de comida”.
Aseguró
Zulma que consume dos bolsas de ración diariamente, a un costo de 30 mil pesos
mensuales, y una bolsa de arroz semanal, a 650 pesos, son 2.600, total unos 32.600
pesos mensuales de comida. “El intendente me dio un vale por 10 bolsas de ración,
antes eran 4 bolsas”. Denis agregó que “esto que dice Zulma demuestra que hay
una administración, no se necesita un contador”.
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