Estuvo en Minas el ingeniero Rafael Guarga, -ex rector de la Universidad de la República,
UDELAR-, quien brindó detalles y conclusiones acerca de la tarea desplegada por
DINAMA en el Barrio Garolini, en una charla realizada en Federación ANCAP,
organizada por el Movimiento Refundadores y Grupo Rescate de la Memoria.
Hizo la apertura José María Gorgoroso -integrante del
Movimiento-, quien presentó a Guarga y al director Departamental de Salud, el doctor
Miguel Paradeda, y a la doctora Carmen Ciganda, directora de la División de Salud
Ambiental y Ocupacional, destacando la importancia de tener representantes de
la salud. Se proyectó un video realizado por Gorgoroso, que muestra de manera
muy clara la existencia de polvo, en diferentes momentos del día.
MEDIR
Guarga, apoyado por un proyector, se refirió al resultado
del estudio y en las conclusiones que se lograron extraer del mismo a partir de
las mediciones realizadas por DINAMA en la Escuela
N º 63 del Barrio Garolini, durante noviembre y diciembre de
2014 y enero del presente año. “De estas mediciones surge el mecanismo por el
cual el polvo de las canteras llega al barrio Garolini”, dijo Guarga.
El equipo instalado permitió realizar promedios diarios y
medir concentraciones de polvo cada 2 minutos, estableciendo cuánto polvo
llegaba en las diferentes horas del día, y se tuvo la certeza que “el polvo
llega predominantemente durante las noches y las mayores concentraciones en
noches sin vientos y sin nubes. Esto es sistemático. Las concentraciones que se
midieron merecen atención. Si se hubiera medido concentraciones insignificantes
no estaríamos haciendo esta presentación aquí, ni ustedes estarían preocupados.
La primera consideración tiene que ver con la salud de la gente, que es lo que
en definitiva nos lleva a hacer el estudio, por lo que las concentraciones
medidas merecen atención”.
CHIMENEA NO
Guarga, dijo que “se tiende a pensar que el polvo que llega
a la zona proviene de las chimeneas de las cementeras establecidas en un área
cercana a la Escuela N º
63. Sin embargo, el estudio muestra que las chimeneas no son las fuentes
emisoras porque los ‘penachos’ de estas suben y no se desplazan horizontalmente
en las noches claras y calmas, cuando el polvo llega a la escuela. El polvo
también asciende junto con el humo y la estratificación lo confina, lo fija, a
300 o 400 metros
de altura. Eso implica que el polvo que sale de las chimeneas encuentra una
condición de atmósfera que bloquea su descenso. Cuando el sol sale, cuando las
corrientes convectivas se desarrollan, el polvo desaparece”.
CANTERAS SI
Para Guarga una vez descartadas las chimeneas como fuentes
emisoras, la pregunta es de dónde sale el polvo. Explicó el concepto de flujo catabático
o de drenaje y su relación con las características topográficas de la zona y se
refirió al rol del paisaje de las canteras de Cementos Artigas y de la estatal
Ancap. Dijo que si el terreno es plano, horizontal, y los únicos movimientos
posibles que la atmósfera admite son los horizontales. “Pero la topografía
minuana si algo no tiene es planicidad. Tiene muchas ondulaciones y es en esa
topografía que se organizan estos flujos catabáticos. La falda del cerro
(Verdún) genera su viento catabático, que mueve cientos de metros cúbicos por
segundo que llegan al rajo (pozo de la cantera) y a su vez los lados del rajo,
las laderas interiores, generan sus flujos catabáticos. Si ingresa al rajo, por
algún lado tiene que salir (de lo contrario se comprimiría el aire dentro del
rajo). Entonces por la parte más baja del rajo salen los metros cúbicos por
segundo que entran debido a que una ladera es más alta que el nivel medio del
rajo. Ese caso el pozo de la cantera se transforma en un excelente mezclador,
lo que hace que se mezcle y uniformice el contenido de polvo en el interior del
mismo. Ese viento catabático que ingresa limpio, expulsa algo no ya limpio desde
el rajo”, graficó Guarga.
CONCLUSIÓN
A modo de conclusión de lo antes expuesto, aseveró Guarga que
“el polvo proviene predominantemente de los rajos de las dos canteras” y que el
mismo “es transportado hacia la escuela en la noche por los flujos catabáticos
que viajan por los cauces del terreno aledaño, afectando también zonas del
Oeste de la ciudad de Minas”.
Lo señalado, aporta una conclusión importante para
determinar cuáles serán los estudios a realizarse en un futuro y qué medidas
adoptar: “Con este diagnóstico es posible actuar y resolver el problema”,
concluyó Guarga su exposición.
Hubo preguntas del público, que demostraron la preocupación y
seguidamente la doctora Carmen Ciganda hizo también una exposición.
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