Ya pasados varios
días de lo que fue el último partido de la selección mayor
intentamos tener la palabra del técnico Gerardo Cano para conocer su
opinión al respecto. La entrevista se postergó algunos días más
en el tiempo en virtud de los constantes viajes por temas
empresariales de Cano, tras lo que fue el pase de Nicolás Lodeiro a
Boca Juniors. Al respecto fue claro al expresar que “estamos
masticando impotencia más que bronca. Este año no sentí bronca,
porque me quedó la sensación que tuve más bronca el año pasado
que este con las cosas que nos sucedieron a nivel deportivo. El año
pasado se podía decir que casi no podíamos perder con ninguno por
el alto nivel de juego que teníamos, pero ese
paráte de 21 días
que nos tuvo afuera de cualquier cancha y entrenamiento serio nos
hizo tener un partido fatídico con Melo. Pero ese nivel de juego que
teníamos nos hacía pensar que podíamos perder con poquitos. En
cambio este año, con los mismos jugadores y el mismo sistema en
ningún momento tuvimos la seguridad de que pudiéramos ganarle a
alguien entrando a una cancha de fútbol. El año pasado era difícil
que perdiéramos con alguno y este año después de jugar lo que
jugamos podíamos perder con cualquiera. La amargura me quedó por lo
del año pasado, que creí que podíamos llegar lejísimo con el
nivel de juego que mostrábamos. Este año ya no fue lo mismo”.
Acotó que “creo
que este año nunca tuvimos un nivel alto de juego. Sí lo que
tuvimos fue lo que tuvo este grupo en los tres años un coraje y unas
ganas de ir para adelante que difícilmente encuentre un técnico en
una selección o en un club. Era un grupo que más allá de las
dificultades que le pusiera el contrario o las dificultades que
nosotros mismos teníamos, indudablemente la vergüenza deportiva fue
un ejemplo. Pero no considero que hubiéramos tenido un rendimiento
que tuvimos el año pasado. En ningún momento nos acercamos a ser el
equipo del año pasado”.
PROCESO INVOLUTIVO
Consultado sobre los
factores de este proceso involutivo que tuvo la selección mayor en
estos tres años, Cano respondió que “difícil de explicar que un
equipo que estuvo tres años junto, el segundo año con un altísimo
nivel y con un tercer año que era para coronar todo ese trabajo, y
que todo se hubiera desmoronado, y que en vez de evolucionar como es
la tendencia, se hubiera involucionado. Hay circunstancias que uno se
pregunta el porqué, pero ya pasó, y me quedo con algunas
sensaciones pero no tengo la respuesta exacta”.
Preguntado sobre el
porqué de un antes y un después tras la pretemporada en el
rendimiento del equipo, Cano dijo que “realmente el tema de la
pretemporada es a lo que menos le atribuyo, porque nosotros en los
dos años anteriores con esa misma pretemporada logramos tener un muy
buen rendimiento. Si bien la pretemporada este año se hizo una
semana después de lo previsto, si hubiera sido por ese problema, a
la semana siguiente estaríamos en el nivel que debíamos estar, y
creo que no alcanzamos en ningún momento el buen nivel. Tengo
ciertas lecturas, pero no fue la pretemporada lo que influyó. Pero
ahora ya no hay remedio ni vuelta atrás”.
SE TERMINÓ EL CICLO
Antes del comienzo
de la Copa, Cano había dicho en varios medios incluido Primera
Página, que fuera cual fuera el resultado, se alejaba del
cargo de técnico de la selección. Al preguntarse si mantenía esa
decisión afirmó que “uno en la vida lo menos que puede tener es
dudas de los pasos que va dando. Así como antes de dirigir la
selección tuve dos o tres oportunidades para poder dirigirla y como
no me sentía con el convencimiento no la dirigí, hoy vuelvo a decir
lo que dije antes de comenzar el proceso, sin saber y con todas las
expectativas que teníamos de que íbamos a andar notable, pero que
en este período consideraba que más allá de cualquier resultado se
cumplía un ciclo. Pienso que hay ciclos en los grupos, en un técnico
con sus jugadores, y ahora tienen que venir ideas frescas, que el
jugador se adapte a otras exigencias”.
OTRO DESAFÍO
Cambiando de tema y
apuntando a lo que es su trabajo en el Lavalleja F.C. y su
participación en la Copa de Clubes como invitado al cumplir su
centenario de fundación, y también para la temporada 2015 del
Minuano, Cano dijo que “afrontamos este nuevo emprendimiento con
mucha alegría. Llegué a un club donde nos reunimos cuatro o cinco
veces antes de aceptar trabajar juntos. Les pedí tres o cuatro
cosas, y entre las principales era que tuviéramos una de las mejores
canchas para jugar al fútbol. Y realmente lo han hecho con un
criterio y una seriedad increíble, al punto tal que la cancha de
Lavalleja hoy en día está hermosa. Después nos han apoyado en
tener una serie de entrenamientos. En cuanto a los jugadores, es un
grupo numeroso, todos chiquilines, a los cuales les vamos a incluir
dos o tres muchachos con más experiencia para hacer un equipo más
balanceado, pero jugado a que toda esa gurisada que ha tenido
Lavalleja en todos estos años, que tuvieron un muy buen pasaje en
juveniles tenga su personalidad y las cosas claras como para poder
plasmarlo en primera división. Le tengo mucha fe a todos estos
guachos, están entrenando notable, va a ser un proceso que no es de
un día para el otro, pero si ellos se ponen las pilas se van a
demostrar asimismo y al hincha de Lavalleja que el equipo está en
muy buenas manos más allá que sean jugadores jóvenes”.
Consultado sobre a
lo que se apunta tanto en la Copa como en el Minuano, el entrenador
comentó que “en la Copa apuntamos a foguearnos, a buscar un
ensamble, experiencia, a jugar con equipos que van a ser netamente
superiores a nosotros, pero que nos va a servir para que este equipo
joven pueda adquirir mañas, experiencia. Y después trasladar todas
esas vivencias al Campeonato Minuano, donde por el grupo que hay de
jugadores me gustaría apostar a jugar de igual a igual a cualquier
equipo y en cualquier cancha. Esa es la mentalidad que siempre he
tenido a la hora de dirigir y estos jugadores perfectamente lo pueden
llevar a cabo”.
Cano confirmó que
Andrés Berrueta y Pablo Alzogaray ya se han integrado a los
entrenamientos, y que Néstor Correa se encuentra trabajando en
Treinta y Tres, “pero se están haciendo gestiones, porque el que
no entrena no juega”, finalizó Gerardo Cano.
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