Ayer se llevó a cabo una concentración y movilización por
parte de funcionarios de la Planta ANCAP
Minas -acompañados por muchos representantes de otros sindicatos de Lavalleja,
y
de los dirigentes nacionales de FANCAP nacional-, con el propósito de informar
sobre el conflicto que mantienen con el directorio de ANCAP. La movilización es
un paro de actividades de 24 horas, que comenzó ayer a las 12 del mediodía en
Minas, pero en otras plantas de ANCAP se instrumentó en otros horarios. En
Minas, luego de la concentración en la plaza Libertad, marcharon hacia
Federación ANCAP.
DENUNCIA A LA
SOCIEDAD
El presidente de FANCAP Lavalleja, Nicolás Di Pólito, dijo
que la movilización es “una denuncia a la sociedad, sobre la represión sindical
que estamos sufriendo en la
Planta ANCAP Minas, lo que llevó a la suspensión `por 10 días
del presidente y del secretario general”.
Marcelo Blanco, de FANCAP Minas, señaló que son varios los
“palos en la rueda de parte
de la gerencia, la jefatura y la administración.
Están acostumbrados a hacer lo que quieren, sin tener en cuenta la opinión del
trabajador, del sindicato que es la herramienta que tenemos. Los dos compañeros
sancionados -el presidente y el secretario general de FANCAP Minas-, fueron a
discutir en un ámbito sindical con el gerente Luis García y el ingeniero
Rolando Nappa para que retomaran a un compañero tercerizado, a quien habían
echado -habían jugado con su puesto de trabajo y le habían faltado el respeto-,
un compañero que tiene una conducta intachable en su trabajo. Y como no tienen
argumentos, salieron a ensuciar a dos compañeros que terminaron sancionando,
pasando por encima del fuero sindical. Se da el contrasentido que tuvieron que
retomar al compañero tercerizado y a partir de eso sancionaron a nuestros
compañeros”.
“NO VAN A PODER”
Agregó Blanco que “como trabajadores organizados y afiliados
a un gremio no podemos permitir estos hechos de gente que se cree patrones de
estancia, que no están acostumbrados a escuchar un no como respuesta. Por eso
la movilización y la convocatoria de hoy, y la asamblea con paralización de
actividades que se está haciendo hoy (por ayer) a nivel nacional”.
Aseguró también Blanco que “no van a poder con nosotros y lo
que a ellos les duele es que estemos unidos. Aquello del dicho divide y
triunfarás, lo hicieron por años pero ya no lo van a hacer más. FANCAP no lo va
a permitir”.
MOVILIZACIONES
Afirmó Di Pólito, que este es “el comienzo de futuras
movilizaciones, ya que hemos estado haciendo asambleas con paro en todos los
departamentos donde existen plantas de ANCAP”.
Afirmó que seguirán “los caminos de la Justicia y el Ministerio de Trabajo, haciendo las
denuncias correspondientes. También vamos a hablar con la gente del Parlamento
para también explicarles la situación y no dejar que sigan pasando estas cosas”.
Destacó el apoyo de sus compañeros de Montevideo, Paysandú y
Minas. “Eso es muy importante, porque esto, no solo es algo de Minas, sino que
pasa a todos, y no es sólo
sobre Nicolás Di Pólito y Nicolás Guerrero, sino que
ya es, sobre
También subrayó la presencia y el apoyo del SUNCA, y del PIT-CNT,
organización que le hizo llegar una propuesta al directorio, “es la misma que
nosotros enviamos, pero sabemos que no se evaluó, ni se la consideró”.
Di Pólito, dijo que la propuesta realizada por el sindicato a
la Gerencia ,
es que “dejen sin efecto la sanción impuesta a los compañeros, desde el primer
día, y que inicien la investigación administrativa como corresponde. Pero sabemos
que ellos no quieren acceder a eso, y no hemos tenido diálogo ni acercamiento
por parte de ningún director”.
SILENCIAR A LAS ORGANIZACIONES SINDICALES
Erwin Villero, secretario general de FANCAP (a nivel
nacional) dijo que “hacía muchísimo tiempo que no se ve una represión sindical
en este gremio -se remonta a la época de la dictadura-, que se aplique una
sanción de esta clase a dos dirigentes sindicales por defender condiciones de
trabajo, el derecho a las libertades sindicales, a la denuncia de la gestión
que se está llevando a cabo en la industria cementera, es intolerable”.
Recordó las “históricas movilizaciones por obras en la Planta Minas.
Tuvimos que caminar muchísimo como gremio para conquistar lo que hoy tenemos, y
eso se lo debemos a todos los actores sociales que nos acompañaron. Fruto de
las inversiones venimos acompañando una estrategia desde 2009 de mejorar las
condiciones de trabajo en la industria del cemento. Al no compartir alguna
visión del directorio político de la empresa -porque las pérdidas que ha tenido
la empresa no son solo fruto de los atrasos cambiarios y de las paramétricas,
sino que hay un fuerte componente de gestión- seguramente en este nuevo período
vamos a tener que movilizarnos para que cambie. Lo que están buscando estos
gerentes, con las sanciones que le han impuesto a nuestros compañeros, es
silenciar a las organizaciones sindicales para poder llevar adelante su
estrategia de liquidación”.
Reclamó Villero que “queden sin efecto las sanciones a
nuestros dirigentes sindicales y que se establezca un ámbito de negociación
durante 60 días para recomponer la negociación colectiva, en particular en la Planta Minas ”.
“NO SE JUEGA CON LOS TRABAJADORES”
Miguel Ramírez, presidente de la Departamental del
SUNCA e integrante de la
Dirección Nacional , señaló que “todo comenzó por echar a un
compañero tercerizado, afiliado al SUNCA. Fue echado y sacado de la planta con
la seguridad por orden del ingeniero Rolando Nappa y Luis García. En ese
momento los compañeros de FANCAP hicieron respetar no solo las libertades
sindicales sino el derecho del trabajador y le hicieron ver a la patronal que
no se juega con los trabajadores”.
Agregó que el SUNCA “ha decidido apoyar a este gran gremio, con la
historia que tiene, y esperamos que cada día podamos convocar a más compañeros
tercerizados, porque a veces hace falta más compromiso de esos compañeros.
Lamentablemente el Directorio de ANCAP, si bien ha ido descendiendo en la
sanción, solo por orgullo, no la quita del todo, porque responde a estos
jerarcas de Planta Minas que nos dejan que desear, como encargados y como
personas. Si la planta funciona es porque hay obreros y trabajadores que la
lleva adelante y no por los iluminados”, concluyó Ramírez.
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