viernes, 20 de febrero de 2015

Belloni: lujo y acierto cultural para Lavalleja

por Gorge Gómez

Seguramente se convertirá en una obligación de aquí en más, las constantes visitas de turistas y minuanos a la Muestra Permanente del Taller Belloni, instalada en el quincho -así le llaman al hermoso salón- del Parque Rodó, y lo ha demostrado la importante afluencia de público en los últimos días, totalmente sorprendido por el nivel de la muestra que posee obras de José Belloni, Stelio Belloni, José Alberto Belloni, Janet Chango y del maestro Luigi Vasalli, en esta primera instancia.
Días atrás se inauguró el Taller de Escultura que llevan adelante José Alberto Belloni y Janet Chango, dirigido a niños, adolescentes y adultos, y que funcionará en el Molino Viejo, donde se revaloriza y se conjunta un histórico espacio con una de las artes más antiguas, y que tanto representan a la humanidad. Sorprendentemente, las inscripciones para el taller ya en los primeros días son muy altas, o sea, hay un camino a seguir y una propuesta a concebir con gran interés.

¡CUÁNTA BELLEZA!

La muestra permanente en el Parque Rodó (otro lugar que fue potenciado ocupando un lugar importantísimo a nivel nacional, por su propuesta y por la aceptación de la gente) tiene obras que son réplicas pequeñas de las grandes obras de José Belloni (Uruguay, 1882-1965) tanto estatuaria como ornamental, y que observadas en esta exposición replantean la mirada a la escultura, a las proporciones, al volumen y al espacio. Obras notables como “El
Chasque”, donde el caballo y el jinete trasmiten velocidad, vuelo, dados por las líneas; la conmovedora poesía de “El dolor de las flores”; la sólida figura de un perro, o la esbeltez de un buey, en un tamaño muy pequeño, pero de una expresividad inmensa; la riqueza plástica de los Ángeles de la Catedral Matriz; las dos figuras perteneciente a la obra “La Tradición”, cargadas de humildad y rasgos sociales; pero son muchas más las obras (en total 35), hay hasta un cristalero hecho por Belloni que demuestra un trabajo tenaz, gran sensibilidad y la constante creatividad, que no solo se quedó en las obras de arte, sino que se expresó desde el arte en todas las manifestaciones.
También se puede ver una cabeza de Cristo de quien fuera el maestro de José Belloni, el suizo Luigi Vasalli, conmovedora obra y muy bien ubicada dentro de la exposición; así como las obras de Stelio Belloni (Uruguay, 1920-1989), un busto de Juan Antonio Lavalleja, o la enorme mano de Artigas, o la sutiliza de la figura del “Arquero Charrúa”.
Ya viniendo a los responsables de esta muestra, José Alberto Belloni expone un inspirado bajorrelieve, y Janet Chango una pequeña escultura en resina, que provoca y conmueve. Ambos artistas demuestran que no se detuvieron en el tiempo de José Belloni, sino que tienen su evolución, en las formas, los materiales y el discurso plástico.
Mención aparte merece la curaduría y armado de la exposición, adecuándola y dotándola en conjunción con los materiales, con la luz del espacio y con la visión que se tiene desde el exterior, todo hace que sea una muestra exquisitamente sobria, pero a la vez muy cálida, y con posibilidades espléndidas para visualizar cada pieza. Un detalle no menor es el pequeño y muy bien hecho catálogo donde se informa el nombre de la obra y su autor.

INCREMENTAR LA CULTURA

Minas, con la instalación del taller y la muestra Belloni, amplía significativamente su espectro cultural, fue una más que acertada decisión del gobierno de la IDL, darle el espacio que corresponde a la Fundación Belloni, con todas las derivaciones artísticas que hay detrás de la escultura -dibujo, pintura, arquitectura, paisajismo, y tantas otras ramificaciones- y que en Uruguay no se le ha dado el lugar que merece. Parece que Lavalleja, rompe con eso. ¡Ojalá! Hay que valorarlo, protegerlo y potenciarlo.

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