En diálogo con Primera Página, el doctor Daniel
Ximénez, director del Hospital Alfredo Vidal y Fuentes de Minas recordó que a
mediados del corriente mes se reglamentó la Ley N° 18.987 que regula la Interrupción
voluntaria del embarazo, generando así "un derecho a la mujer -o pareja-
de decidir sobre la interrupción voluntaria del embarazo".
LEY CON CLARAS DETERMINACIONES
Para Ximénez el articulado de la ley "es muy
claro", en cuanto a los pasos a seguir para cumplir con dicha voluntad. Hay "determinados plazos
legales" para poder hacerlo y "categóricos pasos a seguir" por
la paciente.
Dijo que lo que se debe de transmitir a la población, es
que "sí o sí, las doce semanas como plazo máximo que hay para poder
acceder a los beneficios que esta ley le da". No debe existir margen de
error, ni en los exámenes ni con las
ecografías, ya que algo así "significa estar violando la ley".
Explicó que por más que hay una ampliación del plazo ante
condiciones especiales, que están muy bien especificadas en el decreto,
"cuando el embarazo implique un claro riesgo para la salud de la
mujer", en el caso que "se verifique un proceso patológico que
provoque malformación en el feto, incompatible con la vida extrauterina" o
cuando fuera "producto de una violación acreditada por una denuncia
judicial", casos que "se deben presentar todos antes de las 14
semanas de gestación".
EQUIPO PROFESIONAL
Ximénez comentó que el Hospital cuenta con un equipo de
profesionales conformado por la ginecóloga María Rosa Antúnez, la obstetra
partera Nancy Rodríguez, la licenciada en psicología Leticia Cardama, la
enfermera Pierina Vázquez, la asistente social Norma Rodríguez", que están
trabajando sobre el tema de salud sexual y reproductiva "hace más de un
año" y que van a dirigir "las diferentes pautas a seguir en el
proceso".
Este equipo atenderá con agenda abierta (atención al
momento de la consulta) entre las 15:00 y las 17:00 horas en el anfiteatro del
nosocomio. El mismo asesorará principalmente sobre "las opciones que tiene
de interrupción voluntaria del embarazo", a través "de todas las
alternativas que se puedan presentar en estas instancias", pero con un
criterio "de transmitir información" y brindar apoyo a la paciente
“partiendo de la base de que ningún integrante del equipo le va a decir que es
lo que tiene que hacer".
Informó además que como todos los equipos que trabajan en
el tema "deberá enviar la información mensual de todas las consultas que
se hacen", obteniéndose así "un registro fiel de cuantas intenciones
con cambios de parecer o procedimientos concretos hay".
LAS ETAPAS
La embarazada deberá cumplir etapas como la de ser
atendida en la consulta médica "en policlínica central, descentralizada
periférica de Minas o rural", o en las que tiene que ver con el embarazo,
sobre todo "con los ginecólogos u obstetras". El grupo de trabajo
deberá llenar un formulario implementado para la situación, con los datos del
paciente y entonces "se solicitarán los exámenes correspondientes para
confirmar que la paciente esté embarazada y para certificar las semanas de
embarazo".
Destacó la importancia de "la potestad que se le da
a la paciente", sobre todo cuando son "adolescentes menores de
edad". La ley "pondera la decisión bien justificada de la
paciente", aún "cuando sea menor de edad", y no "del grupo
familiar".
Advirtió que la paciente "deberá tomarse una
instancia de reflexión” (entre 5 y 7 días), para después "retornar a los
servicios del equipo y tomar la determinación". En caso de que se concrete
la interrupción voluntaria del embarazo, el quipo actuante "va a hacer la
indicación para la administración de los fármacos", los que "brindan
una efectividad (más del 97%), que es inocua, no deja secuelas, ni consecuencias
en la paciente".
MEDICACIÓN INOCUA
Tanto las instituciones públicas o privadas "son las
encargadas de hacer la indicación y entrega de la medicación a la
paciente", dijo Ximénez, y advirtió que ninguna institución podrá
"saltar los pasos antes mencionados". Una vez que se concrete dicha
interrupción viene la etapa "de asesoramiento y seguimiento de la
paciente", para darle apoyo "psicológico" y asesoramiento
"en la parte sexual y reproductiva", donde se jerarquizan "las
opciones y el acceso a los métodos anticonceptivos".
La paciente "no necesita de ninguna
internación" porque "va a estar controlada por el equipo de atención,
que le va a explicar todo a partir de comenzar con el proceso de interrupción
de embarazo".
CONTINUIDAD DE INSTANCIA DE DISCUSIÓN
Ximénez sabe que las instancias de discusión sobre este
tema "van a continuar", pero consideró que como prestadores de salud
"debemos asegurarle a la paciente que vamos a cumplir con la ley en
vigencia y que va a tener todas las condiciones para acceder a las especificaciones
de la misma". Si bien "se han hecho varios procedimientos", el
asesoramiento del equipo "hizo cambiar la decisión y postura de una
paciente que iba a interrumpir su embarazo", en un hecho que resalta
"la importancia de saber informar sobre el tema y la situación",
concluyó.
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