“YO SOY
UN PELEADOR, NUNCA ESTOY CONFORME, SIEMPRE VOY A PEDIR MÁS”
Por Gorge Gómez.
Jorge Denevi (Montevideo, 1944) acaba de
recibir, en la 18ª entrega de los Premios Morosoli a la cultura, el Morosoli de
Plata a las Artes Escénicas.
Comenzó sus estudios de teatro en 1959,
accediendo a la Escuela
de Arte Dramático de Club de Teatro (1963 - 1967) bajo la dirección de Roberto
Fontana. Tiene una destacadísima y enorme actividad en la televisión uruguaya y
argentina como actor y director, que comenzó el día de la inauguración de
Teledoce (1962) participando en el elenco de “Prontuario” de Kingsley bajo la
dirección de José Pedro Voiro. Luego vinieron El Flaco Cleanto, con libretos de
Jorge Scheck y dirección de José María Riva; Jaujarana en 1969 que lo llevó a
Canal 11 de Buenos Aires; llegó a las 300 direcciones de los programas de Telecataplum,
La familia y Plop. También dirigió para Canal 10, un ciclo de teleteatros unitarios
para televisión en 1975, la dirección de Telecataplum para Canal 13 de
Argentina en 1982, y la dirección y actuación de una serie sobre la vida de
Jorge Luis Borges para la BBC
de Londres.
En materia propiamente teatral, dirigió,
versionó y/o actuó, a lo largo de 5 (cinco) décadas, en unos 120 espectáculos
de autores nacionales (Schinca, Paredes, Tulipano, Otermin, Schek, entre otros)
y clásicos universales (Neil Simon, Oscar Wilde, Eugene O´Neill, Samuel Becket,
W. Shakespeare, Alan Ayckbourn, entre tantos otros). Es autor, guionista y
productor teatral, incursionó en el cine, en el video clip musical y en el
carnaval, dirigió la
Comedia Nacional , recibió 3 premios Florencio y 2 premios
Iris y es autor de su propia biografía teatral (Tardes enteras en el cine). Después
de recibir el premio, conversó con Primera Página, lo que sigue es
parte de la entrevista.
Después
de tan importante trayectoria, ¿Qué significa para usted este Morosoli?
Aunque parezca mentira, por diversas
circunstancias, es el primer premio que voy a recibir. Obtuve varios Florencio
y nunca fui a la ceremonia, -por diversas razones-, pero este premio, entregado
en el interior, y como dije al recibirlo, refleja la importancia que tiene en
mi vida el contacto permanente con el interior, sentí que tenía que estar
presente, porque estoy en contacto con realidades que no conocemos desde
Montevideo. Y el premio Morosoli en sí es importante por su honestidad, -reconocida
por todo el mundo-, no hay arreglos, hecho por gente objetiva, es el único gran
premio en el interior, -y si hilamos un poco más fino- es el único gran premio
a la cultura que se da en Uruguay. Tiene mucha significación y los que estamos
en el mundo del arte tenemos que agradecer, vine a recibir, pero también vine
porque quería agradecer.
¿Cómo
ve la cultura en el Uruguay 2012?
Yo soy muy peleador, nunca estoy conforme,
siempre voy a pedir más. Pero está mucho mejor, pero no estoy conforme, ¿por
qué? Porque hay que darle mucho más a la gente, brindarles más cosas, hacer entender
que el arte no es solo ir a ver cuadros a un museo, sino que el arte es una
cosa cotidiana, de todos los días, de vivir cada día artísticamente, y esa es
la elevación espiritual que precisa el pueblo uruguayo. A veces me pregunto si
tiene sentido cuando vamos a un pueblo y hay 300 personas viendo un espectáculo
mío, y me respondo que sí, soy positivo y necesito hacerlo, porque estoy en
contacto con el teatro, con la gente, o me muero. Vale la pena, les estamos
dando arte.
Y el
teatro uruguayo ¿cómo está?
Hemos tenido un gran apoyo de la Intendencia de
Montevideo, ha financiado 12 proyectos, 2 de ellos míos, hay algunos actores
que trabajan en esa intendencia ganando su dinero dignamente en extensión
cultural, hay una apoyatura que hay que afinar como todas las cosas que recién
empiezan. Creo que se está dando el fenómeno básico que es la comprensión,
entendimiento, desde el poder, los gobiernos. Hoy hay gente que dice que es tan
importante construir un edificio para el Banco República como dar dinero para
la cultura. He oído a autoridades o exautoridades decir en su momento “¿qué
sentido tiene reconstruir el SODRE? Pudiendo dar ese dinero a las escuelas”.
Pero finalmente todos vimos que no fue ni para las escuelas, ni para el SODRE.
Hay hechos que tienen que entender: después de la Segunda Guerra
Mundial, Europa estaba arrasada, se reconstruían las casas y los edificios a la
vez que se reconstruían los teatros ¿son idiotas los europeos al hacer eso? No,
eso es reconocer que el arte es algo fundamental para la vida de los humanos, y
si no lo reconocen, y creen que es una decoración, entonces vamos muy mal. Por
eso siempre voy a pedir más.
¿Y la
televisión?
Es el gran deformador, cuando voy a pueblos,
donde pregunto cuántas veces vieron teatro o arte, me dicen que nunca o alguna
vez, pero cuando pregunto por la televisión, me dicen los programas que son ‘malas
palabras’ ¿cómo competir contra eso? ¿Tiene sentido competir? Sí, lo tiene, y
no voy a bajar los brazos.
En este
momento está con varias obras en cartel.
Sí, “Éxtasis” en El Galpón, “Regreso al hogar”
en el Telón Rojo.
Denevi, al despedirse, dijo a Primera
Página que se iba a “una casa que dice que está genial, la casa …”, ¿La Casa Encantada ?
“Ahí, hay unos amigos esperando para festejar, dicen que es un lugar muy
interesante, esas son cosas que le hacen bien a la cultura”, y se despidió con
un cálido apretón de manos.
0 comentarios :
Publicar un comentario